Elecciones

Encuestas (electorales), medios y sesgos

Me he entretenido estos días en crear un modelo que represente la siguiente hipótesis de trabajo: Los encuestadores electorales combinan tres fuentes de información: sus propios datos, el consenso de los restantes encuestadores y la voz de su amo, es decir, el interés de quien paga la encuesta. Es un modelo en el que se introduce (y se mide) el sesgo que introduce cada casa en los resultados. De momento (¡no fiarse!

¿Escenarios jerárquicos? (para encuestas electorales en contextos multipartidistas)

Existe una brecha conceptual entre los pronósticos electorales, que son continuos y cómo percibimos los resultados, de manera discreta: p.e., el partido X y el partido Y suman (o no). Después de las elecciones, sobre todo de muchas de las últimas, el público siente perplejidad (frente a los resultados que acaban siendo) a la vista de las predicciones que se hicieron. Y los hacedores de pronósticos publican el consabido artículo explicando que esos escenarios que acabaron sucediendo estaban de alguna manera recogidos en sus (en el óptimo de los casos) histogramas.

Elecciones, mapas... y mi favorito

De entre lo bueno que pudan haber traído las últimas elecciones generales (las españolas de abril de 2019, para quien requiera mayor precisión) puede contarse una pequeña revolución en la cartografía electoral. Debemos agradecérselo al equipo de Kiko Llaneras en El País, que nos han regalado esto. Prueba de que las cosas han cambiado es que ha sido replicado en otros sitios, como este. [Nota: no sé si estoy cometiendo injusticias en el párrafo anterior por omisión o confusión en las prelaciones; si alguien dispone de más o mejor información sobre la intrahistoria de esas publicaciones, que me avise.

Si das la regla por buena, enhorabuena, estás usando el sistema d'Hondt

En una circunscripción un partido obtiene $latex N$ votos. Si manda al congreso $latex n$ diputados, cada uno de ellos representaría a $latex N/n$ votantes. En una circunscripción, una serie de partidos obtienen $latex N_i$ votos. Los primeros $latex j$ diputados del partido $latex i$ representarían a $latex N_i / j$ votantes. Si la circunscripción manda al parlamento a $latex n$ diputados, tiene sentido enviar a aquellos que representan a más votantes.

d’Hondt vs lm

Se cuestiona Malaprensa (aquí) si con un 12.9% de los votos podría Vox obtener 45 escaños. Precisamente porque es lo que le correspondería con una regla de tres. Pero todo el mundo sabe que entre lo uno y lo otro media la regla de d’Hondt, causa de resabidas distorsiones. Y, tras realizar las debidas simulaciones, concluye que sí, que es perfectamente posible. Pero eso es algo que ya sabíamos los que habíamos leído esto, que viene a decir que sí, que por contraintuitivo que parezca, lm atribuye escaños no mal.

Predecir a los predictores por incordiar

Sirve esta entrada para hacer saber lo fundamental del trabajo de fin de master (TFM en lo que sigue) de Susana Huedo (que busca trabajo y es una chica muy sabida, aplicada y espabilada) en el CIFF. Los TFM que propongo y acabo supervisando jamás tienen vocación de criogénesis anaquélica. A Susana le sugerí un tema muy punk y con recorrido: [tratar de] predecir a los predictores. Fundamentalmente, para joder.

Probabilidades de empates en elecciones

Dichoso me tenía por no acordarme siquiera de las CUP, cuando una nota me ha hecho volver a lo de su otrora famoso pero ahora arrumbado por el constante devenir de otras noticias más enjundiosas (pausa) asunto: el de su empate. La noticia en cuestión es esta, que conduce a esto y en definitiva a esto otro, que es donde reside lo enjundioso. En realidad, el caso que explica el artículo es algo más complicado del que aplicaría en el caso de las CUP, pero exigiría igualmente, como ya indiqué en su día, especificar una serie de apriorismos no siempre a mano.

Encuestas electorales: medios y sesgos (II)

Aquí quedó pendiente hablar de datos y métodos. Los primeros proceden de El Mundo. Solicité a Marta Ley, una coautora, los datos pero, antes de que contestase que sí (¡gracias!), me di cuenta de que podía obtenerlos solito: basta con capturar la llamada que el javascript local hace al servidor. ¿Métodos? Mejorables: se suaviza la intención de voto (con loess) y se estima la diferencia con un modelo de efectos mixtos, i.

Encuestas electorales: medios y sesgos (I)

Existen las encuestas electorales. Las publican medios. Algunos, se dice, tienen sesgos. Lo he estudiado y a continuación muestro resultados. Para el PP: Para el PSOE: Para Podemos y cía: Para Ciudadanos: Para IU: En otra entrada, datos y métodos. Hoy solo adelanto que el eje horizontal mide puntos porcentuales y que las encuestas se remontan a enero de 2015.

Las prioris no informativas están manifiestamente sobrevaloradas

La estadística bayesiana se enseña en cursos de estadística (y, frecuentemente, envuelto en un aparataje matemático tan ofuscante como innecesario). Lo malo es que en los cursos y textos de estadística no existe información previa. La información previa sobre los fenómenos en los que se utilizaría la estadística bayesiana están en las aplicaciones, extramuros del muy agnóstico mundo de la estadística y la matemática. Por eso, a los autores de los libros de estadística bayesiana y quienes enseñan cursos sobre lo mismo, enfrentados al problema de llenar de sentido la problemática distribución a priori, no se les ocurre nada mejor que discutir muy sesudamente la excepción (la priori no informativa) en lugar de la regla (la priori informativa).

¿Por qué el empate de la CUP es más raro de lo que parece (y de lo que yo mismo digo)?

Menos el de un presunto profesor, La probabilidad de que 3030 votantes en la #ANECUP empaten con 1515 votos es 1 / 3029 = 0.00033014, lo que corresponde a un suceso imposible – Mario Bilbao (@mario_bilbao) December 27, 2015 todos los análisis que he visto al respecto (1, 2, 3), incluido el mío, coinciden en señalar que la probabilidad de empate en el muy manido acto asambleario de la CUP es relativamente alta: alrededor del 1,5%.

Empates electorales, sorteos y una inadvertida paradoja

Ayer hubo en España una asamblea en la que 3030 personas votaron sobre un cierto asunto: 1515 votaron que sí y otras tantas, que no. La cosa acabó en empate. Una estimación (de las muchas que pueden hacerse con hipótesis de partida distintas) de la probabilidad de que tal ocurra es dbinom(1515, 2*1515, 0.5), que viene a ser 1.5%. Expresado de otra manera, solo ocurriría en uno de cada 70 congresos de tales características.

Encuestas, censos, elecciones

Hace unas semanas tuve un lapso de creatividad. Dejé de escribir durante un tiempo y me dediqué al sucedáneo: leer. Terminé, para variar, unos cuantos libros. Uno de ellos es Proofiness, the Dark Arts of Mathematical Deception que está más o menos bien. En su mayor parte abunda sobre fenómenos conocidos, estudiados y sobradamente denunciados: que hay que recurre a argumentos basados en números, estadísticas o construcciones matemáticas más o menos sofisticadas para dar visos de verdad a mentiras flagrantes.